Me pido tropezarme con tu institnto. Me pido resbalar
con la suevidad de tu piel y perderme en tu ombligo. Me
pido conducirte al fin de los días contigo. Me pido mirar
de reojo cuando pasas a mi lado e intentar oler el perfume
de tu cabello en el aire cuando te sigo. Me pido pelearme
con tu inseguridad y regalarte mil kilos de esperanza.
Me pido no leer tus intrucciones y descubrir tu cuerpo
con mis mano. Me pido regocijarme en tu sonrisa de ayer,
la de hoy también la de mañana.
Por pedir, quiero perdime beber tus horas de locura
contigo. Me pido caminar de puntillas a tu lado para
no hacer ruido mientras te escucho hablar. Me pido
hacer mudanza en tus fantasmas y engancharme a
tus labios. Me pido besar cada parte de tu cuerpo
mientras me cautivan nuestros recuerdos. Me pido
quererte hasta que la tierra se termine, hasta que
dejes de insistir en que tú me quieres más a mi.
Tu me sacas lo mejor de mi. Todo lo que hago,
lo hago por ti. Me pido querdarme contigo.
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